La ECW está muerta. No hablo del chiste que nos presenta Vince McMahon todos los martes por la noche, sino de la verdadera marca extrema que llenaba de acción noches intensas de lucha libre. Las mesas, sillas, tachos y demás parafernalia que acompañaba toda lucha extrema ya no se deja ver. No es por sadismo, pero se extraña el rojo de la sangre en el ring de la ECW.
También se echa de menos a los guerreros de este nuevo coliseo romano. Hombres que se daban a diestra y siniestra con lo primero que encontraban a su paso. No había mesa que los resista, silla que no tenga marcada el cuero cabelludo de estos gladiadores modernos.
¿De quienes estoy hablando? Los nombres más representativos son sin duda Sabu, Rob Van Dam, Sandman, Raven, Cactus Jack, y, cómo no, Tommy Dreamer. Para los que han tenido la suerte de apreciar el arte de la ECW de Paul Heyman, sabrán a lo que me refiero. Luchadores que para coronarse con el título de los mejores tenían que dejar sangre, sudor y lágrimas dentro del ring. Hoy ese espíritu no existe más.
La ECW de ahora bien podría llamarse Entertainment Championship Wrestling, y es aquí donde la WWE experimenta con los nuevos talentos para medir su potencial. Las sillas sólo se usan para sentarse y las mesas para que tras bastidores los luchadores se sirvan piqueos. En medio de éste panorama encontramos a un viejo guerrero: Tommy Dreamer.
Su ID card lo indica como Thomas Laughlin. Actualmente tiene 38 años y es oriundo de New York. Sus inicios en la lucha libre se remontan al año 1989, pero es conocido por sus apariciones en la vieja ECW desde 1993. Tommy Dreamer tuvo una carrera intensa en la empresa extrema de Heyman. Sin duda todo un referente.
Tuvo rivalidades con Sabu, RVD, Raven, Cactus Jack y todo luchador que se le ponía en frente. En todas sus veladas dejaba el alma, el cuerpo, y la sangre, en el cuadrilátero. Esos saltos desde el borde del ring sobre el concreto para aplastar a sus rivales, esos DDT aplicados finamente sobre una silla metálica eran del agrado de los fanáticos.
A Dreamer se le reconoce ser el primer luchador en librarse del super splash de Jimmy ‘The Superfly’ Snuka, haber sido participe en el primer duelo con espadas de bambu junto con Sandman. Luego de 7 años en la empresa gana el título de la ECW en una memorable lucha contra Tazz, corría el año 2000 y la empresa se empezaba a ir en picada. En el DVD The rise and fall of the ECW Dreamer diría: “Sólo gané títulos porque los tipos se iban de la empresa”.
En el 2001 formó parte de la historia de la invasión de WCW/ECW. Luego se convirtió en luchador de RAW, marca en la que llegó a conquistar 14 veces el título hardcore. La lucha más recordada de esta etapa fue contra otro original de la ECW: Rob Van Dam. Ambos se enfrentaron para unificar el título intercontinental con el violento. El ganador fue RVD.
Tommy volvió en el 2005 para el primer One Night Stand. Pero sin duda se le recuera más por el regreso espectacular enfrentándose junto con Terry Funk y su esposa Beulah a Mick Foley, Edge y Lita. La lucha marcó el punto más alto del One Night Stand 2006 y puso en vitrina el talento extremo de los involucrados. Con el regreso de ECW a televisión Dreamer se convirtió en el innovador de la violencia.
Pero a pesar de ser uno de los más aclamados por los fanáticos al entonar el clásico grito ECW (i si dub) no ha sido tomado muy en cuenta. Dentro de la marca de los martes por la noche es un peleador de media tabla y si ha llegado a disputar el título ha sido por falta de mejores opciones. Su última oportunidad titular fue contra Mark Henry, quien llegó a humillar en contadas ocasiones a Dreamer.
Hoy sabemos que Tommy se nos va. De todas maneras se irá de la empresa pues su contrato vence el 6 de junio. El 7 de junio tiene pactado luchar como parte del main event de ECW del evento Extreme Rules (un nuevo nombre para One Night Stand) contra el campeón Cristian y Jack Swagger. El innovador de la violencia se retó a sí mismo y dijo que si no ganaba el cinturón de campeón diría chau y dejaría su carrera.
